martes, 10 de diciembre de 2013

A.mar(te)

Priorat'13
Mario Benedetti dijo: "Escribir es una forma de hacer el amor con la palabra y con la palabra contar historias de amor, otros amores."  Tú has convertido esas palabras en amor y ahora no sé como contar historias. Ahora ya no puedo diferenciar entre tú y las palabras, ya no puedo describir que se siente ni hacer(te) el amor con adjetivos. Tengo el corazón ausente desde que lo descubrí. He probado de llenarlo de tiritas de colores para animarlo, he probado hasta con la poesía, pero ni siquiera has podido convertirte en mi musa. No sé como hemos llegado hasta aquí. Ahora todo es como un mosaico, lleno de trozos difuminados, como la nevera de mi casa, llena de imanes pegados a una superficie.
Dame besos lentos que pueda convertir en historias de amor, imaginemos que estamos los dos frente a frente, que quiero recorrerte con la punta de mis dedos, cogerte la mano y hacer el amor con las palabras que no nos decimos. Llenar el jarrón de sueños y esparcirlos por todo el salón. Construir un mundo que sea nuestro con palabras de amor, dibujarlas en la pared para poder leerlas cuando nos falten. Conviértete en mi Mario particular, muérdeme a versos de amor, de ese que nunca pueden desaparecer, de esos que vamos a encerrar en las palabras y que guardaremos para siempre.


"Si el amor, como todo, es cuestión de palabras, 
acercarme a tu cuerpo fue crear un idioma."
Mario Benedetti

5 comentarios:

Óscar Sejas dijo...

Pues tú ya has dado el paso acercando la llama. Ojalá prenda y de calor.

Un abrazo grande.

Luis Cano Ruiz dijo...

La verdad es que la poesía, la oración, la palabra, odo es un juego de seducción de los sentidos, una forma de enamorarse, de curarse.

¡Qué peligrosas y salvadoras serían las guerras con palabras en lugar de con balas!

Cuídate.

Isabel Motos dijo...

"Tú has convertido esas palabras en amor y ahora no sé como contar historias."

Amo y odio esa sensación en la misma y justa medida... Cuando todo son mosaicos, retazos, palabras y frases sueltas, que no dicen nada y que no diciendo nada, dicen más de lo que podrías decir cuando te han quitado la voz a base de besos y amor del bueno.

Por cierto, los versos finales no son de Benedetti sino de Luis García Montero.

desastreAnimal dijo...

Qué genio era Benedetti...

Increíble guapa, como siempre :)

Noelia dijo...

Fascinante, ni más ni menos ;)