sábado, 28 de agosto de 2010

Dime cuántos besos me he perdido.


A Nina nunca le había gustado Francia.
En la escuela había aborrecido estudiar francés. El por qué de tantos acentos la sacaba de su sitio. Decían que se parecía al catalán en la pronunciación, pero en la forma de escribirlo seguro que no. 
---------------------------------------------------
2006 y conocería a Clément. No tuvo que ir demasiado lejos para hacerlo. 
Vacaciones de verano. 2 semanas en la playa. Junto a su mejor amiga.  En la terraza de un pub. 
Nina se sintió atraída des del primero momento que sus miradas se cruzaron. 
Sus amigos se acercaron para conocerlas. Pero C, se quedó en su mesa. Y eso a Nina le ruborizó la sangre. Si hubiese tenido el valor suficiente, se hubiese levantado y le hubiese arrastrado hasta su mesa. 
A Nina le gustaban los imposibles. Las cosas que requerían imaginación y trabajo. 
Su cita preferida era hacer un picnic. Dónde fuese. Con un mantel de flores rojas y una tableta de chocolate blanco. Comprar fruta natural y queso para untar. Encender una barrita de incienso para envolver ese momento. Un radiocasete o mp3 con altavoces y música de ambiente, en inglés mucho mejor. 
----------------------------------------------------
Los días sucesivos a su fortuito encuentro quedaron todos unas cuantas veces. Playa, piscina y fiesta. Pero de Clément, sólo sabía su nombre, su edad y que era francés. Y las vacaciones terminaron. Se intercambiaron mails y msn. 
Cuando llegó a casa, ella le buscó insaciablemente. Buscó también todos los libros de francés que tenía olvidados en el armario de su habitación y decidió apuntarse nuevamente a clases. 
Al cabo de unos días, tanto ella como su amiga recibieron correos de los chicos de la playa. Y se sintieron estúpidamente felices. Nina podía notar como su corazón dejaba paso a la sangre para que éste se rellenase de nuevo y se distribuyese en menos de un segundo por el resto del cuerpo. Cosas de la ciencia.
-----------------------------------------------------
2008. De viaje a la costa de Francia. Destino Marseille.
Clément esperándolas en el aeropuerto. Irreconocible. 
Segunda noche todos juntos. La amiga de Nina ocupada. Y ella con un francés de título y sin ver a Clément. 
Diez minutos más tarde. Se le acerca con una copa en la mano y con un español bastante acertado le dice:
"Te he echado de menos" y ella sonríe. 
Más tarde, los dos se miran. Y él se atreve a decirle " me gustaría recorrer tu espalda sólo oliéndote, desearía poder poner mis manos donde empieza tu falda y descubrir que el mundo está lleno de fuegos artificiales. Y entonces, te acercaras a mi oreja y me susurrarás bajito que te bese, muy lento. Y lo haré. Y te diré que tengo ganas de hacerte el amor sin quitarnos la ropa. Y tu te morirás de ganas de salir de aquí. Y te pondrás a bailar y tu falda corta subirá sin darte cuenta. Y yo me pondré celoso como nunca..." De repente Nina, se le acerca y le dice " no tienes que pedirlo. Sólo hazlo".


(Aprovecho para decir(le) a alguien : Felicitats!.Tot i que no s'ho mereix, gens.)

sábado, 21 de agosto de 2010



Me he dado cuenta de que tengo miedo a enamorarme. A la vez, de que me muero de ganas de hacerlo.
Me he dado cuenta de que puede, que la culpa sea mía. Digo de estar sola. Por que, tengo miedo de que me lleguen a conocer demasiado. Y a la vez, estoy deseando que eso ocurra. Es una gran contradicción. 
Mis amigos dicen que estoy sola por que quiero. Y que soy demasiado exigente. Y en realidad no se, si es por que nadie cumple mis expectativas (que no se cuales son) o por que hay algunos que las sobrepasan.
Por una cosa u otra, todos los veranos me siento de esta forma. Y mira, que a mi el verano me encanta!
Siento como si los chicos que conoces en verano se quedaran ahí viviendo siempre. Que los días para ellos, sólo fuesen de verano. Y no porque yo lo quiera así. Ellos lo hacen así. 
Me acuerdo de una publicidad de movistar que se lanzó en verano (hará unos años) que decía que en verano te enamoras más, que las endorfinas de tu sistema se activan. Que llamas más por telefono, que tienes más tiempo libre...vamos que deberías conocer más gente. 
Y yo creo que lo hago, lo cumplo. Pero en septiembre todo vuelve al punto zero.  Y ya no sé, si es porque no tengo ganas de conocer(me) o de dejar que lo hagan o simplemente porque los otros se asustan al posible compromiso. 
De todas formas, yo no pierdo la esperanza de enamorarme en verano. No digo, que sea este o el que viene. Pero sé que algún verano estaré enamorada de verdad. Puede que tenga que irme de vacaciones a algún sitio donde no me conozcan, no se. Un amigo mío dice " que fuera (de tu ciudad) nos valoran más". Puede que sea verdad. A mi, creo que me funciona...o puede que sea cuestión de suerte, sólo.


Pero a mi, de las cosas que más me gustan de verano son todas esas canciones que se escriben y todos esos clips en los que sale la playa como protagonista. Y un montón de luces alrededor y de gente disfrutando y de otras entrelazando miradas. De noches mágicas y de mañanas mejores. De acordes de guitarra y luces de colores y de música de fondo. De sentirte lleno.



Foto: Puesta de sol en l'Albufera (Valencia). Agosto '10

lunes, 9 de agosto de 2010

la forma en que tu me miras

Te eché de menos.
Durante más de siete meses. 
Y ahora vienes y  me susurras, en un francés casi impronunciable "tu me manques".
Yo me derrito por el calor, por los rayos de sol que iluminan tu espalda, por que me compres un helado de leche merengada y se derrita en tu boca. Por que las olas del mar acaricien los dedos de mis pies.
Y les hagas fotos. Me hagas fotos corriendo por la playa, con el sombrero de rayas que me regalaste meses atrás. 
Después de hacerme tan feliz, casi como una niña. Me dices que te vas. 
Que "tu veux qu'il me aille avec toi à Marseille". Que ahí también venden faldas cortas y que hay pintauñas de mil colores diferentes. Que las chicas llevan vestidos de flores y que hay un faro blanco des del que se ve el mar más azul. 
Que me regalarás libros con historias de amor y un cuaderno en blanco para que yo pueda escribir la nuestra. 
Y entonces me vienen ganas de volar y sueño con no despertarme más. Pero tengo miedo que lo nuestro vuelva a acabar así...


Storia d´amore from NEWNEW by Fashion Tale on Vimeo.