jueves, 7 de marzo de 2013

Nuestro meridiano privado


Es miércoles por la noche y aquí empieza un nuevo capítulo de la historia. 
Tú y yo en el sofá negro del nuevo piso, la luz de casas ajenas colándose por nuestra ventana, la cena cocinándose a fuego lento, las noticias en la televisión y nosotros dos hablando abrazados sobre lo próximo que vas a comprar para la casa. Me miras y sabes exactamente que voy a pedirte. Te ries e imitas mi próximo movimiento. Rescatas fotografías en las que apareces con dieciocho años y los dos  reímos, yo te digo que jamás te hubiese besado y tu que soy mucho más guapa que la chica que aparece a tu lado. Entonces,  suena el teléfono, te levantas mientras me lanzas un beso al aire, y yo aprovecho para observar detenidamente cada rincón de este piso que ahora va a ser mi segunda casa, algún día tal vez, voy a vivir en él, incluso. Me imagino todo en su debido lugar, los cuadros colocados con delicadeza en la paret, la estantería perfectamente equipada, nuestra foto favorita de Granada adornando la paret desnuda de tu habitación. La ropa húmeda en el tendedero, mis pies tapados con la manta del avión, esperando a que vuelvas al comedor y puedas prepararme mi té favorito en el mundo, que te sientes otra vez, a mi lado y me cuentes novedades, me recuestes contra tu pecho y me des muchos besos y yo no pueda dejar de sentir que me encanta estar a tu lado; que el día es mucho mejor cuando lo compartimos.



5 comentarios:

bull dijo...

Un texto muy natural, romantico... Que puedo decir, felicidades... Es muy lindo el amor correspondido.
Salud!!!

Isabel Motos dijo...

Qué bonito cuando puedes imaginarte el futuro al lado de esa persona, y más que imaginarlo, que casi puedes verlo y tocarlo en cada movimiento que haces... :)

Noelia dijo...

Precioso ;)

X dijo...

Este blog da envidia de la mala jajaja. (Es broma) Que os siga yendo bien. :-)

Carolina dijo...

Precioso texto
El fragmento de la foto a qué pertenece?